angustia
En una oscura cuchillería de la calle Ayacucho, pregunté cuánto costaban unas tijeras para cortar la angustia:
-Cuatro arañas de hoja de banano- contestó el armero.
Me parecen caras. Sigo con la angustia.
Saúl Yurkievich, Trampantojos.
En una oscura cuchillería de la calle Ayacucho, pregunté cuánto costaban unas tijeras para cortar la angustia:
-Cuatro arañas de hoja de banano- contestó el armero.
Me parecen caras. Sigo con la angustia.
Saúl Yurkievich, Trampantojos.
(...)
Van andando los días a lo largo del año
¿En dónde estás?
Me crece la mirada
Se me alargan las manos
En vano la soledad abre sus puertas
Y el silencio se llena de tus pasos de antaño.
Me crece el corazón.
Se me alargan los ojos
Y quisiera pedir otros ojos
Para ponerlos alí donde terminan los míos
¿En dónde estás ahora?
(...)
Y no hay remedio
Andan los días en tu busca
A qué seguir por todas partes la huella de sus pasos
El tiempo canta dulcemente
mientras la herida cierra los párpados para dormirse.
Me crece el corazón
Hasta romper sus horizontes
Hasta saltar por encima de los árboles
Y estrellarse en el cielo.
La noche sabe qué corazón tiene más amargura.
(...)
Vienen otras miradas y otras voces
Viene otra agua en el rio
Vienen otras hojas de repente en el bosque
Todo es otra cosa
Nada vuelve
Se fueron los caminos
Se fueron los minutos y las horas
Se alejó el río para siempre
Como los cometas que tanto admiramos
Desbordará mi corazón sobre la tierra
Y el universo será mi corazón
Vicente Huidobro
un lugar
no digo un espacio
hablo de
qué
hablo de lo que no es
hablo de lo que conozco
no el tiempo
sólo todos los instantes
no el amor
no
sí
no
Alejandra Pizarnik. La extracción de la piedra de la locura.