alarmas
Cuando todo parece ir bien. Cuando parece que el camino va a ser tranquilo y apacible, un pequeño paseo. Cuando empieza a aparecer una sonrisa que aspira a la serenidad. Justo entonces se encienden las alarmas.
Comienzan bajito, apenas un ruido molesto, como el zumbido de un mosquito en una noche de verano. Intentamos apartarlo, descuidadadamente. Cuando queremos darnos cuenta de que los manotazos empiezan a ser demasiados, el sonido ha subido al volumen del despertador, ese que oímos en sueños cuando nos negamos a amanecer. Lejos de apagarse, se hace intenso como la sirena de la ambulancia, y va creciendo, creciendo, como si saltasen las alarmas de todos los comercios de la calle. Ya no podemos manotear, ni taparnos con el edredón, ni meter los dedos en los oídos, ni cerrar los ojos.
Creo que no me va a quedar más remedio que hacerles caso.
Tegan & Sara - Feel It In My Bones - A Take Away Show from La Blogotheque on Vimeo.